...

Yo no tengo fotos de cuando tenía 13 o 14 años y es una lástima porque mis calendarios señalan 17 otoños perdidos...

Cuando tenía algunos 8 o 9 años anhelaba cortarme el cabello y teñirlo de rojo (?).. mi mamá no lo permitió aludiendo que mi cabello castaño se ve mejor que cualquier tinte rimbombante, y es una lástima porque ahora pienso igual que ella...

Yo nunca pinté corazónes con iniciales...

Pero tuve el amor más triste y meláncolico. También yo sostuve la flor más bella y la vi marchitarse en mis manos. Fue un error mio olvidar que hay cosas que no son para sostenerse.

Nunca tuve... [...] lo que sucede es que ahora todo me resulta insoportable...

Debí limitarme a mirarte de lejos.


Frase del día: "El recuerdo embellece lo que toca..."

Ocio

Vacaciones de semana santa... =)... Terminé las cosas que había postergado excusándome en los trabajos escolares que anteriormente me habían mantenido exhausta:
canté, lloré, escribí, soñé,
tomé un curso sobre razonamiento lógico y verbal,
vi televisión hasta tarde,
terminé de leer algunos libros que había empezado desde uffff,
renté películas que siempre quise ver pero que simplemente no encontraba el tiempo para hacerlo....

......

...bueno como que no soy muy buena para escribir sobre las nimiedades que se hacen en el transcurso del día, así que sólo diré que aunque no pude salir de viaje siento que fueron dos semanas muy productivas... =)... espero que haya sido igual (o mejor) para ustedes.

LOS AMOROSOS

Hoy me desperté con un poema dolorosamente sensual, romántico y taciturno de Jaime Sabines:



LOS AMOROSOS

Los amorosos callan.
El amor es el silencio más fino,
el más tembloroso, el más insoportable.
Los amorosos buscan,
los amorosos son los que abandonan,
son los que cambian, los que olvidan.

Su corazón les dice que nunca han de encontrar,
no encuentran, buscan.
Los amorosos andan como locos
porque están solos, solos, solos,
entregándose, dándose a cada rato,
llorando porque no salvan al amor.

Les preocupa el amor. Los amorosos
viven al día, no pueden hacer más, no saben.
Siempre se están yendo,
siempre, hacia alguna parte.
Esperan,
no esperan nada, pero esperan.

Saben que nunca han de encontrar.
El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro.
Los amorosos son los insaciables,
los que siempre -¡que bueno!- han de estar solos.
Los amorosos son la hidra del cuento.

Tienen serpientes en lugar de brazos.
Las venas del cuello se les hinchan
también como serpientes para asfixiarlos.
Los amorosos no pueden dormir
porque si se duermen se los comen los gusanos.
En la oscuridad abren los ojos
y les cae en ellos el espanto.
Encuentran alacranes bajo la sábana
y su cama flota como sobre un lago.

Los amorosos son locos, sólo locos,
sin Dios y sin diablo.
Los amorosos salen de sus cuevas
temblorosos, hambrientos,
a cazar fantasmas.
Se ríen de las gentes que lo saben todo,
de las que aman a perpetuidad, verídicamente,
de las que creen en el amor
como una lámpara de inagotable aceite.

Los amorosos juegan a coger el agua,
a tatuar el humo, a no irse.
Juegan el largo, el triste juego del amor.
Nadie ha de resignarse. Dicen que nadie ha de resignarse.
Los amorosos se avergüenzan de toda conformación.
Vacíos, pero vacíos de una a otra costilla,
la muerte les fermenta detrás de los ojos,
y ellos caminan, lloran hasta la madrugada
en que trenes y gallos se despiden dolorosamente.

Les llega a veces un olor a tierra recién nacida,
a mujeres que duermen con la mano en el sexo,
complacidas,
a arroyos de agua tierna y a cocinas.
Los amorosos se ponen a cantar entre labios una canción no aprendida,
y se van llorando, llorando,
la hermosa vida.

AutoSabotaje

Y sin embargo te quiero...
así de burdo...
así de absurdo...
pero te quiero..."

No es que me acabe de dar cuenta, ya sabia desde hace tiempo...

A-u-t-o-s-a-b-o-t-a-j-e.

Uno de estos días moriré de alguna sobredósis de olvido...

Autoflagelaciones como pequeños sorbos diarios de cianuro, me arden en la piel y en el alma...

me cosumen...

me matan...

me recuerdan que aun estoy viva...

FRASE DEL DÍA: ¿Y cómo huir cuando no quedan islas para naufragar?
Joaquín Sabina

PeRsIgUiEnDo FaNtAsMaS

Apreciable viajero incauto:

Si ya has divagado por las intrincadas veredas de mi pensamiento inconexo tal vez notaste que todos esos retazos de recuerdos que aquí he escrito tienen un nombre... su nombre...

¿De verdad lo amaba/amo? mmm... no lo sé... presiento que... olvidalo...

Aradia vive de recuerdos, y quién no???!... Todas esas fruslerías son el resultado de las neuronas atrofiadas que el me heredó... pero bueno... ahora resulta que Aradia se ha cansado... Ya no habrá más añoranzas patéticas de algo que creí tener y que tal vez nunca existió... Y ya no me permitiré más escándalos ni pseudo-poemas melosos o cursis que el jamás lee.

Bueno, tal vez sólo un último mensaje telepatico con la pedestre esperanza de que esta vez si vea el brillo en mi mirada:

Yo soy una persona normal... como cualquier otra... común y corriente... la única diferencia es que yo soy esquizofrénica. Me gusta poblar mi mundo de murmullos de autoridades fantasmales para no sentirme tan sola al llegar a casa y no tener a nadie con quien hablar.

Me he mentido tanto y tantas veces, que sabes? Yo aun me pregunto si de verdad existes...



-Ahora si, he bajado el telón-

PeRFiDiA

A veces se tiene la extraña sensación de que todo el universo está conspirando para ayudarte a lograr el deseo más recóndito y tan íntimo que ya casi lo habías olvidado... parece que todo el mundo está a tu disposición, que todo fue escrito por la misma mano y que ahora extrañamente decidió mover las piezas del tablero a tu favor...

-Pero exactamente lo contrario a eso fue lo que sentí esa tarde-

En ocasiones pienso que a pesar de todo el destino tiene a bien escribir historias con alevosía... Siento que todos mis sentidos me traicionan al recordarte... presiento que hasta mi sombra me dejó para irse contigo...

...¿y sabes?....

Yo aun me pregunto qué fue lo que pensaría esa gente que al pasar vio a una niña llorando, sentada sola sobre una banqueta.

AlTeR-EgO

Ella era esquizofrénica:
veía ángeles en el desencanto y compraba aureolas para sus demonios...

Ella era una niña triste:
imaginaba un amor puro y platónico donde sólo hubo mísera indiferencia... creía recordar un pasado perfecto donde sólo existieron historias de perfidia y Prozac para sus neuronas.

Ella era paranoica:
soñaba que estaba embarazada, aprendía canciones de cuna y le pedía consejos prenatales al olvido divino.

Ella era erotomaniaca:

a veces lo buscaba en sueños, y despertaba con su nombre en los labios y con lágrimas en los ojos...

Ella era una muchachita utópica:
guardaba en sus bolsillos cenizas de rosas y adornaba su cabello con estrellas...

Ella era esquizofrénica:
y yo un ligero grito... un eco... una sombra...
su sombra...
su amiga imaginaria

Con amor:
para ella

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Hace tiempo escribía que en las habitaciones desoladas de mi pensamiento inconexo había gritos deseando ser liberados... murmullos de autoridades fantasmales... ecos del pasado.. pero hoy... hoy sólo hay un insondable vacío..

silencio...

¿acaso es mejor?